Boletín Diario Informativo de AMYTS del 7 de marzo de 2022

“Volverán a decir aquello de que ‘no hay médicos’”. El déficit de sanitarios en la Comunidad de Madrid se agravará en las próximas semanas tras la decisión del Gobierno de Ayuso de prescindir de miles de profesionales contratados de refuerzo contra el Covid. En concreto, serán despedidos 6.000, lamentan los sindicatos. Una decisión que llega con las urgencias de varios hospitales con problemas en sus plantillas.

Desde hace varios meses las organizaciones sindicales vienen alertando de la situación en las urgencias del Hospital de Infanta Sofía. “Son ya un problema crónico”, afirman delegadas sindicales de Amyts del hospital construido en San Sebastián de los Reyes, que denuncian, una vez más, el “abandono” que sufre este servicio. No hay personal suficiente.

“Desde noviembre se han marchado siete urgenciólogos a otras urgencias”, destacan estas trabajadoras, que achacan esto a las condiciones laborales en el centro. Se van, aseguran, “por mejores contratos”, “mejores condiciones del trabajo” y “por una mejor calidad de vida”. Según explican desde el sindicato, en los dos últimos años “queda sin cubrir siempre al menos uno de los puestos de guardia de sábados, domingos y festivos” de las urgencias. Y no es porque no se hagan guardias. “Gran parte de la plantilla lleva realizando en estos años hasta 7-9 guardias al mes”. La cuestión es que no dan más de sí. “Están agotados”.

Esta situación se produce “pese a que contamos con los contratos Covid”, admiten las delegadas de Amyts. Por lo que todo hace pensar que cuando estos sanitarios no estén el panorama empeorará. Las urgencias del Infanta Sofía no son las únicas que afrontan una falta de personal. En las del Hospital del Tajo también se han registrado problemas.

En las últimas semanas las denuncias de los sindicatos por la gestión de sus urgencias se han sucedido. El centro tiene una “falta de coordinación y organización” evidente, han asegurado. Ante el déficit de facultativos en este servicio se ha ordenado adscribir al mismo “a médicos de otras unidades y especialidades sin experiencia”, criticó Amyts hace unos días, “poniendo en riesgo la seguridad del paciente”.

EL DIARIO: Sanidad incumple su compromiso y mantiene el sistema de elección de plazas MIR que rechazan los médicos

Malestar entre los sanitarios. Varias organizaciones sindicales médicas acusan al Ministerio de Sanidad de incumplir su propio compromiso y no reformar (mejorar) el sistema de elección telemática de plazas para el MIR (Médico Interno Residente) que diseñó el departamento que dirige Carolina Darias el año pasado y que acabó, causalidad o correlación, con un gran subida en las renuncias a las plazas asignadas por el sistema coincidiendo con el cambio a un método que los aspirantes rechazaron desde el primer día.

El Foro de la Profesión Médica, que reúne a las principales organizaciones de sanitarios y asociaciones científicas de España, emitió un comunicado en el que muestra «su enorme preocupación» y «lamenta profundamente que se esté en la misma situación del año pasado», y sostiene que «la situación es aún más grave si se tiene en cuenta que no se están cumpliendo los compromisos firmados (…) en junio de 2021. «Con este sistema no se elige, se asigna», explica Sheila Justo, vicepresidenta de AMYTS (Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid) y miembro de la Secretaría Técnica Nacional Médicos Jóvenes y MIR de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM). «La implementación de un sistema tecnológico ha supuesto un retroceso», se sorprende. Tomás Toranzo, presidente del CESM, escribió en Twitter que es «una auténtica vergüenza y una tomadura de pelo» que el ministerio ahora decida no cambiar el sistema y acusa al departamento de mentir.

El conflicto viene porque Sanidad diseñó un sistema en el que un ordenador reparte las plazas diferido a partir de las preferencias de los candidatos, pero los sanitarios quieren elegir en tiempo real. El año pasado el choque entre los aspirantes y Sanidad acabó con manifestaciones multitudinarias contra Darias y un mini encierro de los representantes de los sanitarios en el ministerio que consiguió un compromiso de cambio. La sorpresa para los representantes sanitarios vino este miércoles, cuando se reunieron con el ministerio y se les informó de que la convocatoria de este curso «será en los términos similares a la convocatoria previa», según informan desde la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM).

Sanidad confirma que no va a haber modificaciones en el sistema de elección de plazas. «En cuanto a los turnos de elección de plazas de Formación Sanitaria Especializada, el Ministerio mantendrá un planteamiento similar al de la Convocatoria 2020/21», ha respondido a este periódico.

Tras una convocatoria rara en 2020 por la pandemia, con recursos judiciales de por medio, 2021 supuso trajo un choque frontal entre Sanidad y los colectivos de aspirantes a MIR, que contaron con el apoyo de los principales sindicatos y colegios profesionales médicos. El motivo fue que el ministerio diseñó un sistema de reparto de plazas de formación sanitaria especializada –incluye a los más conocidos, los MIR, pero también licenciados en Farmacia, Química, Psicología, Biología y los radiofísicos– telemático y, sobre todo, en diferido que los aspirantes rechazaron frontalmente.

Históricamente, las plazas se han repartido de manera presencial en tiempo real. Los aspirantes eran convocados en el salón de actos de la sede del ministerio y en orden según la nota obtenida en el examen de criba, los médicos (o enfermeras, etc.) iban eligiendo en directo especialidad y dónde cursarla a partir de la oferta disponible. Si, por ejemplo, la persona en primer lugar escogía Dermatología en el Hospital de La Paz (Madrid), esa plaza se tachaba de la lista. El siguiente candidato, a sabiendas de esa elección porque la había visto in situ, escogía otra, que a su vez se tachaba de la lista, y así sucesivamente se repartían las 8.000 plazas que se ofertan.

Pero el año pasado (para la convocatoria de 2020, porque va con un año de desfase), Sanidad decidió que no iba a juntar a los aspirantes en su sede por la COVID. Así se evita tener a gente desplazándose hacia Madrid desde toda España y no es prudente meter tantas personas en una sala cerrada, argumentaba el ministerio. Con esa idea, la cúpula del departamento diseñó un sistema por el que pidió a los aspirantes que elaboraran un listado de sus preferencias de plazas, por orden, con tantas entradas como personas tuvieran delante en la lista que luego un programa informático iría repartiendo por orden.

Los sanitarios no daban crédito. Si eras el número 7.000, por ejemplo (había unos 11.000 candidatos), te tocaba rellenar una lista con 7.000 entradas para asegurarte de que se te adjudicaba alguna. Pero, alegaban los aspirantes, de esa manera no existe control alguno de la plaza que le iba a tocar a uno. Y la elección tiene su relevancia: el MIR dura cinco años y no te puedes cambiar, excepto en circunstancias muy excepcionales. Si quieres probar otra especialidad tienes que hacer todo el proceso, examen incluido, de nuevo. «Va a haber muchas plazas rechazadas», advirtieron entonces aspirantes y organizaciones profesionales y sindicales, y el problema de que esto ocurra es que esas plazas se pierden, no se recuperan.

Acertaron: en la convocatoria de 2017 hubo 44 personas que no se presentaron a su plaza; en la del 18 fueron 54; el año de la pandemia 113 y el pasado se dispararon hasta las 190. En cuatro convocatorias los rechazos se han multiplicado por casi cinco.

Para remate, el sistema colapsó y los aspirantes pasaron horas rellenando sus listas. Se manifestaron frente a Sanidad, exigieron un cambio. Y a última hora, el ministerio cedió un poco. En vez de tener que hacer una única lista cada vez, agruparía a los candidatos en grupos de 400 cada día, lo que suponía que en el peor de los casos la lista de cada candidato tendría 400 entradas. Pero le arrancaron otra promesa a Sanidad ese día: «Un compromiso para el perfeccionamiento futuro del sistema de elección de plaza con representantes de la profesión, aproximando el sistema a la elección en tiempo real», se lee en el documento que firmó el director general de Sanidad, Vicenç Martínez.

No va a suceder. No este año al menos, según planea Sanidad. Los aspirantes han sido convocados otra reunión, pero parecen resignados. «No hay tiempo», explica Justo. Se vislumbran protestas en el horizonte.

 

3. Nuevo editorial de AMYTS: «Renovación en AMYTS», por Daniel Bernabéu

EDITORIAL. «Renovación en AMYTS», por Daniel Bernabéu

Este es un editorial muy especial para AMYTS. Pero antes, y en nombre de nuestro sindicato, expresar nuestra más firme repulsa ante el execrable uso de la violencia y la guerra contra una nación soberana como es Ucrania. Desde esta humilde tribuna, AMYTS exhorta al fin de la invasión por parte de Rusia y la retirada de sus tropas; y compele a las partes a llegar a un acuerdo negociado. Dejemos de ser bestias y abracemos todo aquello que nos hace humanos e inteligentes.

Tras este obligado inciso, vuelvo a retomar el hilo. Este editorial es el primero de una nueva ejecutiva que llega a nuestro sindicato profesional tras la decisión del ya ex secretario general, Julián Ezquerra, de dar un paso atrás después de más de una década al frente de nuestra organización. Hablar de Julián Ezquerra es hablar de la historia de AMYTS, de sus orígenes en una confluencia entre dos sindicatos médicos profesionales: CESM-Madrid y ASHOMYT. Es hablar de un proyecto de sindicalismo profesional plural, responsable, dialogante e íntegro, llevado a la realidad. Para todos los miembros de la familia AMYTS: un orgullo haber podido compartir su liderazgo y su buen hacer.

La historia de Julián Ezquerra al frente de AMYTS la tenéis en la hemeroteca de nuestra página web, en sus editoriales y artículos de opinión; está en las actas de las Mesas Sectoriales; está en atriles improvisados frente al edificio de la Consejería de Sanidad o de la Puerta del Sol, manifestándose por las condiciones laborales de médicos y titulados superiores; está en recepciones y actos institucionales, y está en las condolencias ante el adversario fallecido. Y junto a él, aprendiendo, Ángela Hernández, la que el pasado mes de febrero ha sido aclamada como nueva secretaria general.

Para AMYTS ha supuesto una renovación en la mayoría de sus sectores, con Javier Ortega, cirujano general del H. del Tajo, al frente de la Atención Hospitalaria; Javier Bermejo, médico del SUMMA, al frente de las Urgencias Extrahospitalarias/SUMMA;  y de Juan José Serrano, oncólogo médico del HU Ramón y Cajal, al frente de los Médicos Jóvenes y en formación MIR. Es una apuesta fuerte y decidida por dar entrada a nuevas caras y, sobre todo, un mayor protagonismo de los médicos jóvenes, tanto con Juan José, como la entrada de Sheila Justo, anterior presidenta del sector, en la vicepresidencia de AMYTS. Y por supuesto, la figura de nuestra nueva secretaria general, Ángela Hernández, supone una garantía de continuismo en el buen hacer desarrollado por todo el equipo de AMYTS bajo la batuta de Julián Ezquerra.

Por supuesto, en esta transición se transfieren también los múltiples problemas pendientes; que desgraciadamente no han podido ser siquiera encauzados, ante una incomprensible cerrazón por parte de los responsables de la Comunidad de Madrid. La labor de la nueva secretaria general se antoja difícil y complicada para este año 2022.

• La pandemia COVID ha dejado la Sanidad de Madrid exhausta, y ha puesto al descubierto todas las miserias de la infrafinanciación, de la descoordinación y de la desmesurada temporalidad en su personal.
• La vía europea contra la temporalidad iniciada por este sindicato en 2016, de la mano del bufete de abogados de Arauz, ha tenido un primer desenlace agridulce. Por un lado se ha conseguido que Europa reconozca el abuso de la temporalidad por parte de las administraciones públicas en España. Por otro lado, la respuesta del Gobierno con la Ley 20/2021 para intentar reconducir este problema ha sido claramente insuficiente y deja, de momento, demasiadas incógnitas abiertas en cuanto a su aplicación práctica; y no responde a las expectativas de los sanitarios con contratos temporales de más larga duración.
• La insostenible situación en Atención Primaria y en la Urgencia Extrahospitalaria no necesita ser reiterada. A la hemeroteca de los últimos 12 meses me remito. ¡Y sin noticias de Gurb!
• Y el interminable listado de “pendientes” que se han ido acumulando en los últimos 10 años, y que engrosan sistemáticamente el apartado de Ruegos y Preguntas de las mesas sectoriales mantenidas con la Administración.

Muchas expectativas truncadas, mucho hartazgo y mucha desilusión son las emociones que mejor definirían la situación actual de los médicos y titulados superiores de la Sanidad de Madrid. Desde luego, no es el ánimo que uno desearía para la mejor relación médico-paciente.

AMYTS entiende que está en una carrera de fondo en la que la Administración corre a favor del viento de una legislación enormemente injusta para los médicos y titulados superiores (el Estatuto Marco), y permisiva con sus potestades organizativas (abuso de temporalidad, ausencia traslados, aplicación de jornada “excepcional”, negociaciones ficticias y BOCM). Pese a ello, el empeño sostenido de AMYTS, apoyado en los excelentes profesionales de la Asesoría Jurídica, y de la Prevención de Riesgos Laborales; ha arrancado pequeñas victorias de etapa que nos saben a poco, pero que ahí están: en Carrera Profesional, en descanso de guardias, en conciliación laboral, en prorrateo de guardias para embarazadas, en activación de los procesos de interinización con algo más de transparencia,…

Pero las victorias judiciales son lentas y costosas, y dejan muchas ilusiones en el camino. No es posible que, a estas alturas de siglo XXI, y tras la maravillosa respuesta de abnegación y compromiso de los sanitarios madrileños en los momentos más duros de la pandemia, no podamos sentarnos a negociar reposadamente soluciones realistas y comprometidas con el gobierno de la Comunidad de Madrid. ¿Es esto lo que se merece la Sanidad de Madrid? ¿es lo que se merecen los pacientes, agudos y crónicos, de Madrid? ¿es lo que se merecen los ciudadanos de Madrid?

AMYTS tiene un motor diésel renovado, testado y a punto. No vuela, pero resiste y no se detiene. Desde aquí ofrece una mano tendida a la Administración de Madrid para que se siente a negociar (de verdad) los problemas de los médicos y titulados de Madrid, para buscar soluciones y aplicarlas, para llegar a acuerdos. Mientras tanto estaremos dando la cara, denunciando problemas e incumplimientos, inundando los juzgados, y en las portadas de los medios siempre que tengamos oportunidad. Es nuestra razón de ser, y no sabemos hacerlo de otra manera.

No podemos despedirnos sin volver sobre la triste y espeluznante situación que se vive en el este de Europa: ¡Por una Ucrania libre y en PAZ!

Daniel Bernabéu

Presidente de AMYTS

Fuente: Revista Madrileña de Medicina

 

4. CON FIRMA. «La solución es responsabilidad DE TODOS», por Ana Giménez

#SalvemosLaAtenciónPrimaria

En España el sistema de salud tiene un problema muy muy grave de falta de médicos, sobre todo en los primeros niveles asistenciales: faltan médicos para trabajar en las consultas de Atención Primaria, tanto en las de Medicina de Familia como en las de Pediatría; faltan médicos que estén dispuestos a trabajar en las Urgencias, tanto hospitalarias como extrahospitalarias.

La Administración Sanitaria es la responsable del problema creado, y es incapaz de encontrar soluciones para esta terrible situación de deficiencia de médicos: se dedica a poner parches que apenas son capaces de sostener este edificio con los cimientos podridos.

Hace ya muchos años que AMYTS comenzó con la denuncia de falta de profesionales. Decíamos: “¡sin pediatras no hay Pediatría!”. Ya entonces miraron hacia otro lado, sin reconocer que la falta de pediatras en Atención Primaria tendría repercusión en la salud de nuestros menores. Los niños no votan. Lo que tendrían que hacer los pediatras lo harán los médicos de familia, que hay muchos.

La Pediatría era el primer escalón de desmoronamiento de la Atención Primaria. Ahora tampoco se encuentran Médicos de Familia. Ahora decimos:” ¡sin médicos no hay Medicina!”. Y de nuevo los responsables miran hacia otro lado y deciden que lo que hacen los médicos lo pueden hacer las enfermeras…

#SalvemosLaAtenciónPrimaria

Vamos a una Medicina sin médicos. Ya tenemos UVIs móviles sin médicos, consultas de los centros de salud sin médicos…

Sin médicos no hay Medicina. El problema es tan grave que hace falta un cambio de rumbo inmediato. O asumir que perderemos lo que teníamos.

Y para conseguir superarlo, es imprescindible la implicación de todos los actores responsables:

• Hago desde aquí un llamamiento a todos los profesionales de Medicina que trabajan en algún nivel de la salud, y os pregunto: ¿que estáis dispuestos hacer? ¿Estáis dispuestos a permitir que el sistema se hunda? ¿Estáis dispuestos a asumir algún sacrificio para intentar salvar nuestra Sanidad?
• Me dirijo también a los ciudadanos: ¿que estáis dispuestos a aguantar? ¿Estáis dispuestos a asumir una Medicina sin médicos? ¿Para vosotros es lo mismo quién os atienda? ¿Pensáis que podéis hacer algo, o eso es responsabilidad de otros?
• Me dirijo también a los políticos y a los gestores (aunque la politización de la gestión ha hecho que resulte casi imposible distinguir unos de otros): vosotros sois los responsables de la solución; vuestra falta de respuestas y soluciones válidas están ocasionando el hundimiento del sistema… ¿Vais a acudir también a un sistema de salud sin médicos, o vosotros tenéis otras vías para que se os atienda con calidad?

Los políticos no han renunciado a los médicos; ellos tienen otro sistema de salud, pero sin embargo están dispuestos a que los ciudadanos sí lo hagan…

¿Qué estamos dispuestos a hacer? ¿Solo a llorar y quejarnos de lo que estamos perdiendo?

#SalvemosLaAtenciónPrimaria

#SalvemosLaSanidad

Ana Giménez Vázquez

Médico de familia

C.S Paracuellos de Jarama, consultorio de Daganzo de Arriba

Tesorera de AMYTS

Fuente: Revista Madrileña de Medicina

 

5. Europa comienza a eliminar las mascarillas en interiores mientras España piensa ya en su retirada

Ya son numerosos los países de Europa que se han decidido a eliminar la mascarilla en interiores. Suecia, que fue uno de los primeros en retirarla, ha confirmado que los casos de Covid están disminuyendo un mes después de que el país eliminara casi todas las restricciones. Francia ya anunció la pasada semana que también las suprimirá a partir del próximo 14 de marzo y Bélgica lo hace desde este lunes. Se unen así a Finlandia, Noruega y Reino Unido que ya transitan hacia una nueva normalidad.

En cambio, en España todavía sigue siendo obligatoria la medida, que está regulada por un Real Decreto que las comunidades deben cumplir. Pese a ello, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, adelantó el pasado domingo que «pronto» se va a poder quitar la obligatoriedad de las mascarillas en el interior.

También dejó claro que el momento llegará cuando lo diga el Ministerio de Sanidad, que se reúne con las Comunidades Autónomas en el Consejo Interterritorial de Sanidad el próximo jueves, 10 de marzo, para abordar el nuevo sistema de vigilancia del Covid.

De esta manera, algunas comunidades como Cataluña, Madrid y Andalucía, llevan semanas pidiendo a la ministra de Sanidad, Carolina Darias, que se elimine su uso en las aulas. Esta estrategia tiene el visto bueno de la Asociación Española de Pediatría (AEP), que a través de su Grupo de Trabajo de Reapertura de la Escolarización, ya propuso a mediados del pasado mes de febrero un calendario para su retirada progresiva en los recintos escolares.

Por su parte, el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, cree que hay que ir hablando sobre levantar las mascarillas en interiores y considera que hay que plantear ya un «escenario distinto» frente al Covid-19.

En cambio, otras comunidades, como el País Vasco, insisten en que es «demasiado pronto» para su retirada. La consejera vasca de Salud, Gotzone Sagardui, ha advertido este lunes que la pandemia «no está acabada», y ha rechazado que hasta el momento se haya discutido en el Consejo Interterritorial de Salud la eliminación de mascarillas en interiores.

Fuente: ABC