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Boletín Diario Informativo de AMYTS del 11 de abril de 2022

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1. Listados provisionales de méritos de la fase de concurso-oposición de la categoría de Pediatría de Atención Primaria

2. CESM constata que Sanidad ignora por completo las demandas de los futuros especialistas del SNS

3. Nuevo editorial de AMYTS: «Temporalidad de médicos y TS en la Comunidad de Madrid», por Ángela Hernández

4. Los estudiantes de Medicina opinan en la Revista de AMYTS y no te pierdas el artículo de opinión del Grupo de Odontología de AMYTS

5. ¡Por si te la perdiste: esta es la nueva viñeta de Javier Sánchez para AMYTS dedicada a la ministra Darias!

1. Listados provisionales de méritos de la fase de concurso-oposición de la categoría de Pediatría de Atención Primaria

El Tribunal Calificador de las Pruebas Selectivas de Turno libre ha publicado las calificaciones provisionales obtenidas por los aspirantes en la fase de concurso-oposición de la categoría de Pediatría de Atención Primaria.

El Tribunal, en su sesión de fecha 29 de marzo de 2022, acordó:

1. Publicar, como Anexo a este acuerdo, las relaciones por orden alfabético y de puntuación, que contienen la valoración provisional de méritos de la fase de concurso de los aspirantes aprobados en la fase de oposición.

2. Contra las presentes relaciones, y según se establece en la base citada en el párrafo primero, los interesados podrán presentar ante este Tribunal las reclamaciones que estimen oportunas, en el plazo máximo de diez días hábiles a contar desde el siguiente al de su publicación en la siguiente página web.

Fuente: AMYTS

 

2. CESM constata que Sanidad ignora por completo las demandas de los futuros especialistas del SNS

La Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) ha asistido este viernes a una nueva ‘reunión de seguimiento’ de las que se comprometió el Ministerio de Sanidad a mantener para mejorar el proceso de elección de plazas e incorporación de los profesionales de Formación Sanitaria Especializada tras el conflicto generado en las últimas convocatorias. En este caso, y con la Resolución sobre el procedimiento recién publicada en el BOE, los representantes de los futuros especialistas del Sistema Nacional de Salud han asumido que los responsables ministeriales, con Carolina Darias a la cabeza, no tienen ninguna intención de escuchar las demandas planteadas ni de contar con su opinión como afectados para mejorar el procedimiento.

Así lo han trasladado los responsables de CESM, FSEunida, CEEM, OMC y SATSE presentes en la reunión telemática -la cuarta desde octubre y que también ha tenido problemas técnicos para la conexión- con miembros de Ordenación Profesional y Salud Digital del ministerio, quienes se han limitado a informar sobre las cinco páginas publicadas hoy en el BOE que señalan cómo deben realizar su solicitud los aspirantes, que en el caso de Medicina comenzarán el próximo 21 de abril en turnos de 400 personas y cuya incorporación está prevista para el 30 y 31 de mayo.

Según denuncia la responsable de Médicos Jóvenes y MIR de CESM, Sheila Justo, Sanidad no ha tenido en cuenta ninguna de las propuestas que han planteado los futuros especialistas a través de sus representantes. Es decir, no habrá comisiones de seguimiento diarias -serán semanales-, no se podrán establecer turnos de mañana y tarde para que se elija en cupos de 200 personas en lugar de las 400 fijadas, ni por supuesto se puede aproximar el sistema a una elección en tiempo real, pese a que así se firmó por el anterior director general de Ordenación Profesional en junio de 2021.

En este sentido, la propia Justo ha pedido a la nueva directora general, Celia Gómez, que se dejara por escrito el compromiso que ésta ha asumido al señalar que sí considera que debe avanzarse “hacia el tiempo real” en próximas convocatorias, ya que se está repitiendo lo vivido el año anterior, cuando el responsable de la Dirección General firmó idéntica intención pero un año después no se ha avanzado nada en esta línea. Incluso en este punto, los responsables ministeriales se han limitado a decir que “valorarán la propuesta” pero sin darle ninguna firmeza a la petición.

Ante esta situación, CESM quiere denunciar que una vez más el ministerio de Sanidad con su máxima responsable al frente, Carolina Darias, no está mostrando ningún respeto por sus profesionales sanitarios desde antes incluso de que entren a formar parte del Sistema Nacional de Salud, pasando por encima de compromisos firmados, cumpliendo únicamente con el trámite de mantener reuniones que son meramente informativas para cubrir su expediente y haciendo que cada promoción de nuevos aspirantes a Formación Sanitaria Especializada tengan que ver cómo el proceso que decide su futuro puede convertirse en una lotería. Una vez más, la Confederación reclama que se respeten todas las garantías para un procedimiento que no puede dejarse al azar de una adjudicación.

Fuente: CESM

 

3. Nuevo editorial de AMYTS: «Temporalidad de médicos y TS en la Comunidad de Madrid», por Ángela Hernández

“Todos estos objetivos de modernización y mejora de la calidad de los servicios públicos no se pueden alcanzar sin una adecuada gestión del principal activo con el que cuenta la Administración, como es su capital humano.”

Ley 20/2021, de 28 de diciembre, de medidas urgentes para la reducción de la temporalidad en el empleo público.

Los problemas de la provisión de médicos y TS en el nivel de atención hospitalaria se han descrito y se sufren día a día por los afectados, por todos, por los que arrastran años de precariedad y por los que se van sumando ante la ausencia de soluciones.

Puede decirse que se trata de un problema sobrediagnosticado, que tiene múltiples soluciones, pero que por múltiples motivos no se aplican en la dosis y pauta correcta para solucionarlo. ¿Por qué sucede eso? Como se lleva tratando de contar, las razones son multifactoriales y no todas atribuibles a la Administración, aunque por su función y capacidad organizativa sea la principal responsable.

Las dudas sobre el modelo funcionarial aplicado a la medicina -con esa aplicación refinada y con ciertos rasgos de maquiavelismo a una mayoría de estatutarios a través del estatuto marco- cada vez menos recuerdan en su ejercicio liberal previo al desarrollo de la Seguridad Social. Una medicina duramente castigada u olvidada por los colores políticos de uno u otro signo, con momentos históricos como la famosa frase de Alfonso Guerra de que no descansaría hasta ver a los médicos en alpargatas (imaginen la felicidad que debe sentir este señor en el momento actual). Dudas que no se traducen en alternativas apoyadas por la profesión sin realmente unidad más allá de los intereses fragmentados de cada uno de los representantes. Pero este es un fascinante debate que, me temo, como el de la crisis del SNS, se prolongará durante décadas mientras cada uno continuará la película por su cuenta (aunque no dejo de tener esperanzas en que algún día suceda).ç

Empezaba con una frase de la propia ley de temporalidad. Ley que provoca sus problemas, sobre todo en aquellas comunidades que, como la Comunidad de Madrid, han hecho durante años una flagrante dejación de funciones al respecto. Es clásica la frase de que la Administración es la mayor empresa temporal, triste pero irrefutable. Pero sin la Ley de temporalidad, no me cabe duda, los problemas de temporalidad de los médicos y facultativos madrileños seguirían prolongándose en el tiempo.

Problemas que en su mayoría describe la propia ley y otros añadidos que afectan con especial dureza a médicos y TS por su propia idiosincrasia:

  • El retraso de los procesos selectivos, o incluso su ausencia durante décadas en algunas categorías de facultativos, y su insuficiencia en número de plazas cuando se producen.
  • El problema de la ausencia de movilidad en las categorías de médicos y TS que ejercen en el ámbito de hospitalaria. ¡Derecho que está sustraído en la CM desde el 2001!
  • Transferencia de plazas de reposición generadas por facultativos a otras categorías por su división en 45 categorías y la insistencia de la Administración en que no le resulta eficiente hacer procesos pequeños y frecuente. Aunque no entiendo qué podría haber más eficiente que asegurar la dotación y estabilización de médicos y facultativos en un escenario de carencia de dicho personal, pero está claro que las prioridades difieren desde el punto de vista del observador.
  • El retrato en el desarrollo de los procesos selectivos, de la estabilización cuyos anuncios se iniciaron en el 2016, no se publicaron las OPE de médicos hasta 2018-2019 y aún no hay un solo médico que haya elegido su plaza fija. Ejemplo de ello es que en la Medicina familiar y comunitaria, en la Medicina de Urgencias y Emergencias (SUMMA 112) y en la Pediatría de Atención Primaria se examinaron a finales de 2019, estamos en abril del 2022 y aún siguen esperando. Tres categorías deficitarias en el SERMAS por cierto.
  • La ausencia de capacidad o voluntad de planificación, con administraciones más pendientes de los sondeos electorales que de aplicarse a las tareas para las que fueron elegidos.

Se podría seguir y seguir con lo que supone para los afectados, con los problemas que supone la toma de posesión para equipos que llevan años trabajando juntos y en algunos casos sus especializándose, las amenazas a “los de fuera”, etc.

La cuestión es dónde ponernos el foco del espíritu de la ley.  La interpretación que, de momento prefiere la Comunidad de Madrid, parece limitarse tan solo a “su” realidad administrativa más encorsetada. Centran las críticas en la ley y pasan casi de puntillas por ella. De otra forma no se entiende su reticencia a contemplar más de mil plazas que, de tenerse en cuenta, facilitarían mucho la aplicación y disminuirían los efectos colaterales de los afectados de mayor antigüedad aportando más posibilidades a los de menor tiempo en el sistema.

Para AMYTS se debería contemplar la realidad asistencial, el día a día de los centros. Insiste la Administración en interpretar de forma férrea los contratos estructurales, pero no hacen la menor mención a que el último proceso de interinización de paso de eventuales a plazas estructurales se remonta al 2017 con fecha de corte de diciembre de 2016. Habrían cabido ya al menos otros dos procesos (con fechas de corte diciembre 2018 y diciembre de 2020) que habrían estructuralizado una buena parte de ese pool de eventuales que no cuentan en los cálculos de temporalidad de la administración. Y a ese respecto no hay autocrítica ni asunción de responsabilidades. Ahí no hubo interpretación a rajatabla de la norma administrativa.

Al menos, parece que esa realidad van a tener que empezar a contemplarlas anualmente en un informe al Congreso de los Diputados como especifica en las medidas de seguimiento de la temporalidad de la disposición adicional segunda: “Dicho Informe contendrá, como mínimo, el detalle funcional con escala autonómica y local de todas las situaciones de temporalidad en el empleo público”. Esperemos que así la Comunidad de Madrid empiece a especificar el número de ese pool de médicos y facultativos que prestan asistencia en el SERMAS y que ni siquiera se contemplan en la eventualidad no estructural.

La situación de momento es la que es salvo que la movilización de los afectados (que contará con todo el apoyo de AMYTS mientras se contemplen la situación en su conjunto) lo evite. Con lo que hay encima de la mesa, en el momento actual, como mínimo, sería imprescindible que la Administración agilizara las medidas para tratar lo mejor posible a los profesionales. Aunque el plazo marcado por la ley de temporalidad para los procesos que describe (concurso y concurso-oposición) sea el 1 de junio para convocarlos, ¿qué impide que los deberes estén hechos en abril y el concurso se acelere a antes de verano? Considerando las plazas insuficientes para el tapón formado, al menos las que quieren sacar que las agilice de forma que esa pequeña parte tenga claro su futuro y los que van a concurso-oposición se puedan planificar. Dicha acción redundaría en un beneficio claro para unos y en la disminución de la incertidumbre para otros. Pero la Administración parece demasiado ensimismada en sus propios problemas para desarrollar las medidas que no tenía en su agenda. En la Mesa Sectorial del miércoles 31 de marzo nos anunciaron con escaso entusiasmo que veían difícil el concurso hasta el segundo semestre y los exámenes de las OPE 2018-19 antes del último trimestre del año.

Cuando insistimos a la Administración en la necesidad de que las plazas de concurso se agilicen lo antes posible (y se ha explicado el motivo y su importancia para los profesionales de cara a su planificación), su reacción ha sido señalar que los plazos administrativos son los plazos administrativos y que muy probablemente coincidan en el tiempo porque no lo contemplan después de verano.

Para que no vuelva a acumularse una nueva bolsa de temporalidad, no queda otra que seguir con el pico y la pala desenmascarando todos aquellos contratos extremadamente precarios que la Administración niega a considerar por no estar presupuestados por Hacienda. Hay que explicar que existen y que, por ejemplo, alguien que viene cubriendo las Urgencias -o la especializada que sea desde el 2010- es imposible que entienda que como lo ha hecho con contratos que están para otras cosas… su plaza no se tiene en cuenta en las medidas para reducir la temporalidad.

El tema de la provisión de médicos y titulados superiores en el en el SERMAS es un tema controvertido y sin una adecuada solución en la actualidad. La contratación temporal sería más justa por bolsa, pero seguro que se le encontraría pegas también. Hay alternativas, una de las que más nos gustan para médicos y facultativos es la posibilidad de un concurso abierto y permanente. Esto se solucionaría con una firme voluntad política, que no asoma en el horizonte a medio ni, me temo, a largo plazo. O con una posición unida e inequívoca de la profesión. La temporalidad ha alcanzado unas cotas tales que recientemente el propio Colegio de Médicos de Madrid se ha unido en la preocupación y denuncia de la situación. Así que quizás esta vía tenga un futuro más halagüeño y por fin se acerque el sueño por el que desde AMYTS llevamos mucho tiempo trabajando: una mesa de negociación propia de médicos y facultativos superiores. Porque no se puede tratar como igual lo que es, de facto, diferente.

Ángela Hernández Puente

Secretaria General de AMYTS

Cirujana general y del aparato digestivo

Fuente: Revista Madrileña de Medicina

 

4. Los estudiantes de Medicina opinan en la Revista de AMYTS y no te pierdas el artículo de opinión del Grupo de Odontología de AMYTS

EL RINCÓN DEL CEEM.

Este mes de abril continuamos con la nueva sección gestionada por el Consejo Estatal de Estudiantes de Medicina. En ella recogen percepciones, realidades y expectativas de nuestr@s compañer@s aún estudiantes. 


«Los médicos jóvenes ya no tienen vocación», por Luciana Nechifor, estudiante de 5º de Medicina en la Universidad Rey Juan Carlos

«Los médicos jóvenes ya no tienen vocación», «antes éramos médicos 24 horas al día y ahora solo lo sois 8 y os vais a vuestra casa» o «no os tomáis en serio la profesión» son algunas de las frases que hemos podido escuchar últimamente. Y yo me pregunto, ¿qué es la vocación?

Me gustaría que leyendo esto reflexionáramos al respecto y nos preguntáramos a nosotras mismas qué es para nosotras la vocación. La palabra vocación tiene su origen en el latín, de vocare, que significa ser llamado o acción de llamar, es decir, ser llamado hacia un determinado fin o destino.

Una vez establecida la definición, os pregunto, ¿a cuántas de nosotras nos llamó vuestra voz interior o un ser divino cuando teníamos 5 años diciéndonos que fuéramos médicas de mayores? Apuesto, una vez más, a que a pocas nos ha ocurrido. La mayoría de nosotras estamos aquí, ya sea estudiando o ejerciendo, por diferentes motivos: porque nos llamaba la atención, porque nos daba la nota, por una «estabilidad laboral», por prestigio, por dinero, porque a las mejores de la clase se les guiaba hacia este camino, por esa voz divina de la que hablaba… Mil y un motivos por los cuales estudiar y ejercer la Medicina, y ninguno de ellos menos válido, siempre y cuando la profesión esté bien ejercida y el paciente contento con esta atención.

Aunque no lo pueda parecer a simple vista, cualquier persona que estudia, acaba la carrera y ejerce como médica tiene vocación. Es una afirmación tan simple como esta, ya que si no la tuvieran no habrían dedicado el esfuerzo y el sacrificio que conllevan 6 años de clases, prácticas y seminarios, 1 año de falsa oposición y 4-5 años de residencia que se supone que es un «periodo formativo». Pero nada más lejos de la realidad: son más mano de obra que personas en formación. ¿De verdad creemos que alguien sin vocación, la tuviera o no desde los 5 años, sería capaz de hacer todo esto? Siempre hay excepciones, pero como puede haberlas en cualquier otro ámbito.

El hecho de que trabajemos 8 horas (aunque a veces sean 16 o 24) y después lleguemos a casa e intentemos olvidarnos del trabajo no es menos legítimo que un ingeniero que vuelve a su casa y hace exactamente lo mismo. ¿Por qué las médicas nos tenemos que enfrentar a esta clase de argumentos? ¿No tenemos derecho al descanso? Al fin y al cabo, la Medicina es una profesión, igual que podría serlo el Derecho, pero el paternalismo médico sigue teniendo unas garras bastante largas de las que no nos acabamos de librar.

Finalmente, comentar la importancia y el papel de la vocación en la precariedad laboral. Se han dejado pasar tantas veces injusticias por el hecho de que somos médicas y cuidamos personas… No es justo, ni nunca debe servir como justificación para las condiciones laborales. Recordad siempre que están en vuestras manos, y que ante estas debemos manifestar nuestra oposición y no dejar que la jefa de servicio de turno, las instituciones o la propia administración nos trate como una vocación y no como personas. No dejemos que la vocación que tenemos sirva NUNCA como justificación a la precariedad laboral.


CON FIRMA. «Los raros de la Atención Primaria», por el Grupo de Odontología de AMYTS

“La mejor estructura no garantiza los resultados, ni el rendimiento. Pero la estructura equivocada es una garantía de fracaso”

Peter Drucker (1909-2005) 

Llamamos “RAROS” a unos facultativos de AP no incluidos en Medicina de Familia (MF) y Pediatría: profesionales que son categoría A1, que están incluidos en la estructura de AP en los Centros de Salud y son de titulación -Médicos Estomatólogos u Odontólogos- asimilada, incluidas en la misma categoría profesional según RD 184/2015 del 13 de marzo, publicado en la pág. 11 del BOE del 7 de abril del 2015. En definitiva, a los “Dentistas».

Pertenecemos desde hace más de 25 años a la Atención Primaria, y nos han cambiado la denominación y nombre en varias ocasiones, porque, como decimos, somos “los RAROS de la AP”: éramos “Unidades de Apoyo”, la última es “UNIDADES ESPECÍFICAS”, donde nos han “colocado” con las Matronas y Fisioterapeutas.

Pero seguimos explicando por qué nos consideramos “RAROS”: somos facultativos de igual categoría profesional que MF y P, somos entrada directa al sistema sanitario igual que ellos, pero cuando existe alguna mejora siempre quedamos fuera.

Así quedó reflejado en la negociación de huelga de hace un año, enrocados en no considerarnos y dejarnos fuera junto a los farmacéuticos en el PLAN DE MEJORA de la AP para igualar las retribuciones con nuestros homónimos de Atención Hospitalaria hasta casi el último minuto. Y así va a pasar con el cambio del PLAN de MEJORA de AP que quieren instaurar, donde de nuevo nos han dejado sin equiparar.

Pues, a pesar de tener la misma categoría profesional, el mismo horario, la misma apertura de agenda, no nos incluyen ni para cobro por TAS, ni en la ruralidad, ni llegamos de lejos a la retribución de productividad fija que tienen los otros profesionales A1 tampoco.

¡Ay, queridos colegas! Que no somos ni de AP ni de AH, pero sí parece que tenemos que ser del EQUIPO cuando les interesa. No nos hemos achantado en la pandemia para colaborar, y en otros momentos; cuando es para mal sí quieren que lo seamos. Por ejemplo: vienen las vacaciones y los permisos y, aunque tengamos suplentes de sobra para cubrirnos (estamos esperando la creación de una bolsa única centralizada como hay en MF y P como agua de mayo), nos dicen que para no crear diferencias de trato con los otros estamentos -diferencias de trato, ¡ja!-, no podemos irnos en un puente, de vacaciones, o de formación sin consensuar, incluso no con el otro odontólogo , sino a veces con la higienista, y nos dicen que porque todos somos un EQUIPO y que no se pueden crear diferencias…

Y la última es que nos han cambiado el tipo de retribución en un complemento como la productividad fija. Nos asignan un nº de TIS con un coeficiente ponderado ridículo, y quieren que sigamos asumiendo las TIS no asignadas a nuestros cupos, que no estarán reflejadas ni remuneradas en el complemento salarial correspondiente. (Comprobado ayer en nómina de marzo, con gran cabreo de los profesionales). Tengo que poder atender al 100% y me remuneras por el 50%.

A ver, ¿somos EQUIPO o no lo somos? Porque para lo malo siempre nos toca, y para lo bueno NUNCA estamos incluidos.

Por último, dejar constancia que no nos olvidamos de los otros A1 también “raros “que están en la AP por el estilo: sin bolsa única, sin productividad fija equiparada. Se trata de los farmacéuticos y los psicólogos de AP. Con la esperanza de que algún día, algún año, esto cambie, seguiremos…

PD. Después de ver semanas atrás que en 16 minutos de video nuestra gerente de AP no nombra nuestra categoría ni una vez, añadimos “raros e invisibles”.

GRUPO AMYTS DE ODONTOLOGÍA

Fuente: Revista Madrileña de Medicina

 

5. ¡Por si te la perdiste: esta es la nueva viñeta de Javier Sánchez para AMYTS dedicada a la ministra Darias!

Javier Sánchez, médico de Familia y viñetista de AMYTS, nos trae un nuevo trabajo en este mes de abril.

En esta ocasión mira a la lamentable elección de plazas FSE que ha elaborado el Ministerio de Sanidad y que vuelve a tener a los aspirantes y a toda la profesión médica en contra como el año pasado.

De hecho, en esta nueva convocatoria la desvergüenza es aún mayor porque ante las movilizaciones del año pasado, la ministra Carolina Darias prometió realizar una «escucha activa» de los aspirantes para mejorar el formato de elección. Cosa que no ha sucedido y que llevó a miles de afectados de toda España a protestar por las calles de Madrid.

Fuente: Revista Madrileña de Medicina

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